Un ataque aéreo de las fuerzas israelíes contra instalaciones militares en Saná, capital de Yemen, dejó al menos dos personas muertas y más de 30 heridas, de acuerdo con reportes de las autoridades hutíes.
El hecho ocurrió el fin de semana y provocó explosiones en diversos sectores de la ciudad, generando daños materiales en zonas habitacionales cercanas.
Testigos señalaron que las detonaciones se registraron en las inmediaciones del palacio presidencial y de una academia militar. La cadena Al Masirah, vinculada a los hutíes, informó que también fueron alcanzadas una central eléctrica, una estación petrolera y edificios próximos a dependencias gubernamentales.
El ejército israelí confirmó la operación militar y precisó que tuvo como objetivo plantas eléctricas y un complejo militar cercano al palacio presidencial.
La ofensiva fue justificada como una respuesta a recientes ataques con misiles y drones lanzados por los hutíes hacia territorio israelí.
En un mensaje difundido en redes sociales, el ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, compartió una fotografía junto al primer ministro Benjamín Netanyahu y al jefe del Estado Mayor, Eyal Zamir, con la leyenda: “Observando cómo los aviones de la fuerza aérea atacan Yemen”.
Por su parte, dirigentes hutíes aseguraron que los ataques “no modificarán su respaldo a Palestina”.
Hashem Sharaf Addin, ministro de Información del movimiento, afirmó que la ofensiva fue una agresión contra la soberanía de Yemen y reiteró el apoyo a Gaza.
Nasruddin Amer, subdirector de la oficina de medios hutí, advirtió que las operaciones militares continuarán mientras persista el bloqueo y los ataques israelíes.
El conflicto entre Israel y Hamás, iniciado el 7 de octubre de 2023, ha tenido como consecuencia el involucramiento de los hutíes, quienes han lanzado misiles balísticos, drones y ofensivas contra embarcaciones en el mar Rojo.
