El Rijksmuseum de Ámsterdam permitió por primera vez que un visitante pasara la noche en una de sus salas y el afortunado fue Stefan Kasper, profesor de arte quien tuvo la oportunidad de dormir junto al cuadro La ronda de noche de Rembrandt, tras convertirse en el visitante número 10 millones desde la reapertura del museo en 2013.
Kasper relató que pasó la noche en una cama instalada a dos metros de la pintura, en total privacidad.
Explicó que, aunque no era un seguidor del pintor, la experiencia le permitió observar detalles que nunca había notado.
Según sus palabras, los personajes del cuadro parecían cobrar vida.
El director del museo, Taco Dibbits, destacó que esta oportunidad fue única en la historia del Rijksmuseum y formó parte de una celebración especial.
Kasper, quien adquirió su boleto durante una visita con sus alumnos del instituto Montessori deAerdenhout, recibió un trato exclusivo que incluyó una cena servida por el chef Joris Bijdendijk.
Durante su estancia en el museo, el profesor aprovechó la privacidad para recorrer las salas vacías y tomar fotografías.
También mencionó que no percibió la presencia de seguridad y que pudo disfrutar del momento en total tranquilidad.
El Rijksmuseum no ha anunciado si repetirá esta iniciativa en el futuro.