El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó la reanudación de la construcción del muro en la frontera con México.
La Casa Blanca informó que la barrera se extenderá 127 kilómetros adicionales, principalmente en Texas y California.
Mientras avanzan las obras, agentes estadounidenses han reforzado las medidas de seguridad con la instalación de alambres de púas para impedir el ingreso de migrantes.
Además, la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, señaló que la administración «continuará con la deportación masiva de personas en situación irregular».
Trump firmó una orden ejecutiva para terminar con la política de captura y liberación de migrantes y aseguró que la nueva infraestructura fronteriza contará con «materiales más resistentes».
Según el mandatario, el muro será más costoso que el tramo construido en su administración anterior, pero «garantizará mayor seguridad».
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) indicó que la ampliación se enfocará en la frontera este, en los límites de Texas y Tamaulipas.
Por su parte, la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) también informó sobre la reciente detención de 100 presuntos integrantes de la pandilla Tren de Aragua en Aurora, Colorado, como parte de operativos realizados en 11 estados.
