Una brutal tormenta invernal que sumió en el caos a millones de personas en plena Navidad en Estados Unidos tardará en disiparse, dijo el lunes el Servicio Meteorológico Nacional (NWS), luego de que intensas nevadas y el frío polar causaran cortes de energía, retrasos en los viajes y al menos 32 muertos.
Al menos 52 personas han muerto como resultado de una tormenta de invierno que arrasó EE.UU. durante el fin de semana de Navidad, con 28 muertes solo en el condado de Erie de Nueva York.
En Buffalo, al oeste de Nueva York, una tormenta de nieve dejó a la ciudad a la deriva y los servicios de emergencia no pudieron llegar a las áreas más afectadas.
“Es (como) ir a una zona de guerra, y los vehículos a los lados de las carreteras son impactantes”, dijo la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, oriunda de Buffalo, donde las acumulaciones de nieve de 2,4 metros y los apagones amenazan las condiciones de vida.
Hochul dijo a los periodistas el domingo por la noche que los residentes todavía estaban en medio de una “situación muy peligrosa que amenaza la vida” y advirtió a todos los que se encontraban en la zona que permanecieran en sus casas.
Más de 200.000 personas en varios estados del este se despertaron sin electricidad la mañana de Navidad y muchos más vieron alterados sus planes de viaje de vacaciones, aunque la tormenta -prevista para durar cinco días- con condiciones de ventisca y vientos huracanados mostró signos de alivio.
El clima extremo provocó temperaturas bajo cero en 48 estados de Estados Unidos durante el fin de semana, dejó varados a los viajeros con miles de vuelos cancelados y atrapó a los residentes en casas cubiertas de hielo y nieve.
Se confirmaron 32 muertes relacionadas con el clima en nueve estados, incluidas al menos 13 en el condado de Erie, en el noroeste del estado de Nueva York y donde se encuentra Buffalo. Las autoridades advierten que el número seguramente aumente.
En la región de Buffalo, propensa a la nieve, las autoridades describieron condiciones históricamente peligrosas, con apagones de horas y cuerpos hallados dentro de vehículos y debajo de bancos de nieve, mientras los trabajadores de emergencia siguen buscando a los que necesitan ser rescatados.
El aeropuerto internacional de la ciudad permanece cerrado hasta el martes y la prohibición de conducir sigue vigente para todo el condado de Erie.
“Ahora tenemos lo que se hablará no solo hoy sino durante generaciones (como) la tormenta de nieve del 22”, dijo Hochul, y agregó que la brutalidad había superado a la anterior tormenta de nieve histórica de la región, la de 1977, en la “intensidad, duración y ferocidad de los vientos”.